YA a la VENTA
Ya a la venta controversial novela cargada de suspenso sobre el gran poeta español, Federico García Lorca, fusilado en los inicios de la guerra civil
“De pie se encuentra el poeta en la planta alta de la casa, sobre el tercer escalón de la larga escalera en su descenso hacia la planta inferior. Allí vio a la Muerte atrincherada tras la puerta…”
El juez ¿el nuevo sacerdote? O... la ruta del éxito económico
De la serie Collages político-literarios
Copyright © TecniKavege Editions. c.a.
(2:30 minutos de lectura)
“Podemos ver todo el destino de los EE.UU. en el primer puritano que desembarcó en sus costas”, dijo Alexis de Tocqueville en su famoso libro La democracia en América (1835), aun cuando el puritanismo en la creencia popular, se reduce a un culto a la abnegación que niega toda posibilidad de diversión, que viven obsesionados con la austeridad, la que no solo aplican al ámbito personal sino al de las iglesias, por lo que las despojaron de sus imágenes… se los cree primos de los amish por haber sufrido la persecución religiosa de siglos anteriores y debido a esa extraña mezcla de luteranismo y calvinismo radical. Sin embargo, el puritanismo es mucho más que eso. Se sostiene que una estrecha relación entre lo religioso y lo civil nacida de la doctrina puritana determina la fundación de los EE.UU., así como su organización política y sus normas jurídicas (Vázquez Gómez, 2009). Creen los puritanos en un pacto con Dios como los elegidos por Él, para vivir una vida piadosa, tanto como individuos como comunidad, que les permita redimirse del pecado y obtener la salvación eterna. Seriedad moral y religiosa que los hizo famosos en el siglo XVII por su intento de imponerse sobre el manejo de su nación, Inglaterra, que los llevó a una guerra civil. Pero fue en sus colonias en Estados Unidos donde se impone a plenitud logrando alcanzar la forma “congregacional de gobierno eclesiástico” en donde solo los elegidos (personas bautizadas, morales y ortodoxas) podían votar y gobernar. Lo cierto es que al día de hoy, esa doctrina los ha conducido por la senda del éxito económico y del mayor bienestar social. Y, aun cuando puede que se esté viendo liberada del elemento eclesiástico, se sigue manteniendo intacta en el plano civil, lo que convierte a la norma jurídica y su acatamiento —en el que “nadie está por encima de la ley”— en el nuevo credo religioso y a los jueces y tribunales en los templos en los que se ejerce el “ritual eclesiástico.” Una religión que se sigue tratando de imponer al punto de tener una clasificación de los países dependiendo del grado de su sometimiento a ella en términos de: Primer mundo encabezado por ellos, de Segundo y Tercer mundo, en donde se ubican los más pobres. De ser esto correcto ¿cree usted que esta es la fórmula para salir del “subdesarrollo” como también han sido llamados los países más pobres? ¿Cree usted que todos deberíamos ser puritanos?
Copyright©Karin van Groningen Chiriboga
Referencias:
Tocqueville, A. (1835). La democracia en América. Editorial Trotta. 2da. Edición. 2018
Vázquez Gómez, R. (2009). El poder político y la religión en el puritanismo: La colonia norteamericana de Massachusetts. Revista Española de Derecho Constitucional. ISSN: 0211-5743, núm. 86, mayo-agosto (2009), págs. 145-182
Alexis de Tocqueville en su libro La democracia en América (1835)